21 diciembre 2008

Globo

P E N S A M I E N T O OE N T R E OL A S ON U B E S

[ Javo al interior de 'el Valentín' ]

Volar es de las cosas que más llaman mi atención. Este año
–curiosamente– ha sido de los pocos que no he tomado un avión,
sin embargo, el día de mi cumpleaños me subí al parapente y en días recientes al globo aerostático, en Tequisquiapan.

He de confesar que quería subirme desde marzo, pero mi papá decidió hacer otra cosa para su onomástico, argumentando que
el globo ‘es algo para viejitos’ y que ‘no tiene mucha emoción’.

Esta ocasión no precisé celebrar a mi padre para hacerlo, no obstante debo reconocer que acabó teniendo toda la razón (tal como suele suceder con los padres)… o eso, o que mi cuerpo me exige cada vez más adrenalina.

Pese a que la vista es maravillosa y que uno va al encuentro de los primeros rayos del sol por encima de los montes, me parece que la mejor parte de esta aventura se la ha llevado Claudia Coutiño, quien me acompañó hasta el lugar de despegue pero no subió. En cambio, Claudia corrió hasta la canasta justo en el momento en el que
‘el Valentín’* se alzaba ante la mirada atónita de todos los ahí presentes, para pasarme cual carrera de relevos la cámara fotográfica. Si no hubiera sido por eso, quizá esta aventura
sí hubiera sido calificada tal como lo hacía mi papá,
de ‘poco sorprendente’.

La panorámica, el viento entre los dedos que sostenían la cámara
(en algún momento sin la correa puesta, ¡uy!), así como
las reflexiones que pude hacer acerca de mi nivel de ímpetu,
han sido –en definitiva– la mejor experiencia de esta aventura.
Abajo la gente, las casas, los árboles, los animales tan diminutos,
el paisaje que pareciera poderse tomar con una mano. Mi lente
tan privilegiado y el pensamiento literalmente entre las nubes.


E L OV U E L O OE N OI M Á G E N E S

1. Javo preparándose para el vuelo en globo.

2. Calor a ‘el Valentín’ para que surque en colores.

3. Vista de ‘una estrella’ desde nuestro globo. Buen augurio.

4. La panorámica y el ojo implacable de mi cámara.
¡Qué experiencia!

5. Tequisquiapan visto desde el cielo.

6. 2 globos arman la composición de esta toma.

7. Al fondo, la Peña de Bernal.

[ * ] Nombre del globo en el que volé, debido a los corazones que tiene.


[ Fotografías: Javier Carlo y Claudia Coutiño. Tequisquiapan, México. 2008. ]

No hay comentarios.: